En tiempos de Covid.

Madrid , 18 de marzo de 2020

Buenos días amig@ invisible!

Me llamo Marisa, y trabajo en el Hospital que estas ingresada. Soy maestra y mi tarea consiste en dar clase a los niños cuando están ingresados en el hospital. Es uno de los trabajos más bonitos que puede haber.

Ahora hemos suspendido esa actividad, como tantas otras, porque ahora toca #quedarseencasa, nos dicen que es lo mejor que podemos hacer para colaborar con todos esos grandes profesionales que os están atendiendo a los que habéis tenido la mala suerte de que este ingrato virus os haya elegido… dicen que al final se instalará de forma temporal en cada uno de nosotros… pero que se prepare el bichejo porque aquí estamos todos para hacerle frente.

En mi ya larga vida, en la que como a todo el mundo me han pasado cosas que me han hecho pasarlo mal, he podido comprobar que de todo lo malo surge más tarde o más temprano algo bueno, como dice el refrán “ no hay mal que por bien no venga”.Cuando se está en esos momentos malos como te ocurre a ti ahora amig@, es difícil pensar en esto y que sirva de consuelo pero esto ocurre. Dentro de la mala suerte de haber pillado el bicho, tienes la gran suerte de que te están atendiendo en un Gran Hospital y con unos grandes profesionales. Esto pasará no me cabe duda… y tendremos que sacar un aprendizaje de ello y un crecimiento tanto personal como social. Ahora son momentos duros para todos, sobre todo para los que estáis enfermos y para los que no pueden #quedarseencasa porque tienen que ayudar a la sociedad con su esfuerzo a que todos salgamos de aquí.

Yo particularmente me siento rara en “mi encierro dorado”… creo que nos pasa a muchos… sentimos impotencia de lo poco que podemos hacer cuando hay tanta gente dándolo todo, arriesgando su salud… actuar a través de la inactividad es cómodo pero es muy raro pero ahí estamos para contribuir en lo que podamos en la extinción de este virus.

Son días malos los que me consta que estás pasando, aislada, sin poder ver y quizá ni saber de los tuyos, viendo a los profesionales que te atienden, o mejor dicho, no viéndolos porque supongo van con su indumentaria de protección…pero cada día que pasas allí, es un día menos que te queda para superar este periodo.

Desde aquí quiero expresarte mi apoyo y mis deseos de que esto termine para ti y para los tuyos lo antes posible.

Recibe un abrazo virtual muy fuerte que ya tendremos tiempo de estrecharnos más íntimamente y resarcirnos de este aislamiento.