El mundo perdido.

Palabras,, más palabras que se llevará el viento. Que resonarán quizá, solo en la mente de los impotentes, de los que no podemos hacer nada. ¿Cuántas reflexiones sobre esto, aquello y aquel otro? Intentando ser oídas. ¿ A quién le importa ? A nadie! A nadie parece importarle la vida, el bien humano, la vida humana. Todo,todo parece estar al revez. Al escribir está humilde reflexión, basado solo en lo que he vivido y vivo cada dia ; me enjuicio a mi mismo pues, es casi imposible escapar ileso de la creciente maldad disfrazada de nuevas leyes y normas legales que no son otra cosa que el más absoluto culto al libertinaje, la expresión de la más pura malicia, oprobio y desvergüenza. Los hombres escudados y excusados bajo leyes lo van cambiando todo a su conveniencia . Ya nada parece conmovernos,hemos perdido ya nuestra capacidad de asombro y de aquellos tiempos de antaño ya no queda nada, tan solo un puñado de inaptados, desubicados de tiempo y espacio que solo estorban.

La piedad,bondad, generosidad, honradez,honestidad,respeto,la moral y el amor desaparecen, arropados por la envidia, prepotencia,el orgullo,egoísmo y la indolencia. Estamos tan vacíos. Somos un oscuro y profundo abismo que nunca se llenará. Deseando tanto, obteniendo y volviendo a desear más; tan llenos de vanidad y egolatria, deslumbrados con un modernismo ,con una tecnología que lo va suplantando todo, llevándose lo bueno, saturandonos con nuevas ideas e inventos futuristas sin futuro porque, sin nuestro habitad nuestro futuro será incierto y todo esto, solo hará que nos destruyamos unos a otros.

Dicen: ,,lo que no te mata te hace más fuerte,, ¡ Indolente ! Es la palabra; lo que no te mata te hace más indolente.

Hemos estado tan cerca de morir,, vivimos el horror de una pandemia . Sufrimos el terror,la angustia y la incertidumbre, el dolor de la perdida de seres queridos y amigos, de los que ni siquiera pudimos despedirnos, surco nuestro rostro y aún así,no hemos aprendido nada. Nos hicimos más indolentes,endurecimos más nuestros corazones, jugamos con la vida humana .

Cuántas guerras,sequías,huracanes,inundaciones,maremotos, terremotos,sunamis,pestes,fenómenos, deshielo en los glaciares, descontrol en los sistemas de invernadero, conflictos internos, desplazamientos,emigración,abandono familiar, hambre y nosotros como si nada. ¡ Indolentes ! Indolentes es la palabra.

Camino entre la multitud de una humanidad de la cual solo quedan escombros, una humanidad ensimismada, distraída,envanecida, hipócrita, impia, automatizada. Esa.. aunque duela es la trizte realidad.

Siguen cayendo las bombas,elementos ardiendo cruzan el cielo, se estremece la tierra,el cielo se torna oscuro; madres que gimen, niños que lloran sin esperanza,otros yacen en la tierra para no levantarse más, hombres en guerras con la mirada vacía, completamente deshumanizados, muertos ya; mientras los reyes de la tierra se reúnen en grandes banquetes y brindis para decidir sobre el futuro, en medio del rumor de una guerra total . Mientras tanto… el resto del mundo todo lo parodia ,haciendo de la desgracia humana un chiste,haciendo caso a famosos «expertos» que señalan, que la risa es la mejor terapia para sobrevivir a estos tiempos y nosotros: pobres, es nuestra forma de manifestar el hecho de no poder hacer nada y no nos queda más que, reír para no llorar y continuar así con nuestra indolencia, ensimismados en lo vanal,haciendo que la piedad se esconda de nuestra alma ,que la llama a gritos,,angustiada,oprimida, sabiendo que será condenada por la vanidad,los deseos y los sin razón de la carne, mientras la impiedad se goza rebozando el corazón de odios,de maldad,de distracciones por miles en los que el hombre pierde su tiempo,condenando su alma.

Pero no todos debemos seguir el mismo rumbo,hay uno entre un millón que hara la diferencia lo sé, que sabe que tales cosas no se pueden cambiar pero, eso no significa que deba vivir de tal manera y violentar sus principios,aquellos valores espirituales y morales que le enseñaron sus padres y que ya hoy se están viendo como algo obsoleto . Hoy lo anormal ya es normalidad y es una realidad apoyada por la ley,leyes que van dirigidas a buscar un nuevo orden en el cual no hay espacio para el conservador de la vieja norma. Defendamos nuestros espacios,nuestras ideas,el derecho a expresarnos, a desarrollarnos y criar nuestros hijos bajo el concepto más básico y espiritual posible sin caer en lo radical,aceptando algunos cambios que no atenten contra la condición de ser humano,de esa esencia de ser semejantes a Dios y del rol que deben desempeñar el hombre y la mujer naturalmente.

Preparemos,eduquemos,rescatemos valores de está humanidad que se estingue. ¡ Basta de indolencia! Seamos humanos.

Has la diferencia.

En Donatexter trabajamos con la plataforma de Amazon usando su programa de afiliados donde, al adquirir productos a través de los enlaces de esta página, podemos recibir una pequeña comisión que nos ayuda al mantenimiento de la web.

Por tanto, en calidad de Afiliado de Amazon, Donatexter obtiene ingresos por las compras adscritas que cumplen los requisitos aplicables.

Importante: estas comisiones no te afectan en nada ni tienen un coste adicional.

2 comentarios

  1. Poeta, don Orlando. Tremendo contenido, triste pero real, espejo de la humanidad actual. Te admiro, estabas levitando al momento de tu musa en este poema sentido. Es un poema que te obliga a tocar suelo, que te insta a cambiar el rumbo, a volver los pasos a las buenas enseñanzas de otros tiempos ya atrás. Totalmente pensando en el aquí, en el ahora pero con mucha visión en el futuro. Lo felicito. Poesía como esta se amerita, que llame a la reflexión. Es aquí cuando afirmo que la poesía también aporta para salvar la humanidad. Bendiciones a tu arte.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *